CON GANAS DE VOLVER
Londres, es un sitio que no te puedes cansar de visitarlo y siempre te faltará tiempo para disfrutar de tan hermosa ciudad, cada vez que veo un reportaje turístico de Londres siempre capta mi atención, quiero decir, que tengo muchas ganas de volver, incluso cuando estaba en el avión de regreso pensaba: "ahora mismo volvería".
Era la primera vez que iba, emocionado y feliz de poder hacer un sueño realidad, pensaba que no llegaría este día tan esperado, una persona muy importante en mi vida me dijo "paciencia y paciencia que es la madre de todas las ciencias", y así fue, llegó el momento de preparar mis maletas, coger mi chaqueta, bufanda, guantes y mi gorrito para protegerme del frío.
Cuando llegué lo primero que hice para celebrarlo fue ir a unos de sus famosos Pubs, a tomar unas cervezas y comer algo rápido, listo para empezar a conocer la ciudad.
Estuve hospedado en un hotel situado a pocos pasos del Hyde Park y Kensington Gardens, creo que no fue tan mala elección, soy de caminar y casi todo lo que conocí lo hice caminando, son largas las distancias pero estaba tan maravillado con la arquitecturas de sus edificios, las barriadas y sus casas, los escaparates de sus negocios, restaurante y todo en general, que no denotaba el cansancio, hice útil el servicio del taxi en un par de ocaciones, y fue por encontrarme tan lejos del hotel y ser muy tarde después de cenar.
Sin duda tenía que subir al ojo de Londres (London Eye) una experiencia magnífica, tenía la ciudad en una panorámica que sólo puedes percibir de esa altura , con la cuidad iluminada y desde las alturas observas que tienes mucho que recorrer.
Como anécdota puedo decir que fui testigo de una petición de compromiso, una pareja que estaba justo a mi lado, el chico se arrodilló y saco un anillo para pedirle matrimonio a su novia, soy bastante romántico y me gustó ser participe de aquel momento.
En la visita del London Eye puedes aprovechar para mirar la Abadía de Westminster y el Big Ben, así aprovechas el tiempo.
Dedícale un día entero para estar en Notting Hill, su mercadillo donde hay una gran variedad de cosas para comprar, desde ropa hasta cosas de colección, el barrio donde están sus pintorescas casas es exactamente como si estuvieras en la famosa película de Julia Roberts y Hugh Grant.
A la hora de comer elegí un restaurante Portugués, su plato estrella era el pulpo guisado con alubias pintas, si te gustan los potajes deberías animarte a probar esta receta.
Maravillado con el Hyde Park: puedes estar horas y horas disfrutando de este espacio, durante el tiempo que estás ahí no te das cuenta que en su exterior hay una inmensa ciudad caótica, llena de comercios y lugares de ocio, te recomiendo de disfrutar en este entorno tranquilo y hostil.
Una de las celebraciones que más visitantes atrae a Londres, es el cambio de guardia, se celebra todas las mañanas en el Palacio de Buckingham, su duración aproximadamente 45 minutos, la guardia de seguridad del Palacio hace su cambio de guardia de una manera muy especial, acompañado de una banda musical militar.
Descubriendo una cultura y gastronomía diferente en el centro de Londres, se encuentra en pleno Soho, estoy hablando de Chinatown, sus bulliciosas calles y un magnífico colorido, es como si estuvieras en otra ciudad, no me podía perder entrar a comer y también a cenar en alguno de sus restaurantes.
Después de hacer una cuantas fotos por Trafalgar Square, la plaza más famosa de Londres dirígete al Covent Garden, un sitio repleto de comercios, teatros y restaurantes.
También tienes que visitar su interminable avenida Oxford Street, una de las calles más famosas del mundo con sus innumerables tiendas de ropa prepárate para ir de compras, cuando veas sus grandes pantallas de vídeo y carteles publicitarios de neón es que as llegado a Piccadilly Cirqus.
No perderse la visita al famoso Harrods, famoso gran almacén donde encuentras un apartado de tienda Gourmet y puedes degustar también.
En mi cuarto día, fui a visitar la ciudad universitaria de Oxford, en mi época estudiantil siempre había soñado con estudiar en unos de sus internados, y como todos los sueños no se cumplen, solo me queda por visitar y el resto producto de la imaginación.
Y lo que me queda por descubrir de Londres, por eso digo que volveré sin duda.
CIUDAD HERMOSA...
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